Si sólo quieres esquiar te puedes quedar a dormir en las pistas, sea en Candanchú, Astún o Formigal. Si lo quieres todo vente en autobús a Jaca. Porque en Jaca lo tienes todo. Tienes las pistas a tiro de piedra. Y tienes mucho más. Porque hay gente que al acabar de esquiar sólo quieren dormir y descansar. Pero tú tal vez tienes más fuerzas para seguir. Tal vez te gusta pasear y comer estupendamente en una de las muchas tascas que llenan las callejuelas de jaca. Puede que te guste visitar su magnífica catedral, tomar algún pastel en la plaza o tomar vinos de somontano, cervezas o copas hasta que el cuerpo aguante.
Por eso en Jaca tienes opción a elegir. La variedad es infinita así que solo dependerá de tus ganas y tus fuerzas. Historia, arte, gastronomía, marcha. Un poco de todo. Y eso sí, con al comodidad de volver a casa descansando en el autobús. Sin preocuparte de conducir y sabiendo que el autobús a Jaca es la decisión más inteligente.