En medio de una zona que ya no es recóndita ni desconocida existen unas pequeñas islas rocosa que tienen tanto que ofrecer por encima del mar como por debajo.
En la Costa Brava hay aún lugares que permanecen ocultos a la mayoría de gente. Para llegar a la Costa Brava tenemos autobuses desde Barcelona o desde Gerona y allí podemos elegir entre lugares más o menos turísticos.
Estartit aún conserva su encanto y para los buceadores es desde luego un paraíso. Aguas claras y luminosas como deben ser las del Mediterráneo, una flora y fauna espectacular a escasos metros de la superficie. Un auténtico deleite para los buceadores. Allí hay cientos de buceadores, los que prefieren el simple snorkel, los que optan por trajes completos de equipos aqualung o mares o los que frioleros ellos se visten como si estuvieran en el ártico.
Pero sea como sea, sumergiéndose más o sumergiéndose menos lo que es seguro es que los visitantes de la costa brava, llegados en autobús o en cualquier otro medio de transporte podrían disfrutar de lo que ofrece la superficie y de lo que esconde el interior del mar.