Se acerca el calor y como todos los años, esas ganas irrefrenables de ir a la playa, desconectar de la rutina y planear escapadas inolvidables. Muchas veces asociamos las mejores playas a zonas caribeñas o islas remotas, pero lo que deberíamos saber es que nuestro país nos ofrece unas amplias posibilidades en este ámbito que muchas veces pasamos por alto.
Hoy te redescubrimos Barcelona. La famosa ciudad de los Juegos Olímpicos de 1992, limitada al sur por la cadena montañosa de Los Pirineos, por el mar al este, la Sierra de Collserola al oeste, el río Llobregat al sur y el río Besós al norte.
La ciudad cuenta con una gran cantidad de puntos de interés que la Unesco ha declarado como Patrimonio de la Humanidad. Te los mencionamos a continuación para que en tu próxima visita no se te escape ninguno: Parque Güell, Palacio Güell, La Casa Milà, Casa Vicens, Fachada de la Natividad y cripta de La Sagrada Familia, Casa Batlló, Palacio de la Música Catalana y el Hospital de San Pablo. Recordarte que Barcelona cuenta con una red de metro de 11 líneas y de 103 líneas en caso de los autobuses urbanos. Es por ello que moverte por la ciudad será rápido y económico, llegando con facilidad a todos los puntos que anteriormente te mencionamos entre otros muchos como la Monumental de Barcelona o sus famosas Ramblas.
Sin embargo nuestra intención no es sólo promover la ciudad por su calidad cultural y artística, nuestro objetivo es recalcar la presencia de unas playas que cuentan con la bandera azul de la Unión Europea, certificando su excelencia. La regeneración del litoral que se llevó acabo para la recepción de los Juegos Olímpicos ha posibilitado la existencia de 9 playas y 4´2 km de litoral destinado a baños. Además todas sus playas cuentan con servicios que las diferencian y posicionan como: duchas, baños, puestos de la Cruz Roja, chiringuitos, vestuarios, alquiler de hamacas…
En la playa de La Barceloneta, se encuentra un centro de talasoterapia y un polideportivo marítimo con piscinas de agua de mar. Es importante destacar que cuando el tiempo no acompaña para darse un chapuzón, las playas están preparadas para realizar deportes como el tenis o el vóley.
No podemos cerrar este post sin hacer referencia al extraordinario Puerto Olímpico de Barcelona, que idearon un grupo de arquitectos para que Barcelona contara con un puerto que fuera digno de la ciudad. El Puerto se utilizó como sede de las competiciones de vela de los Juegos Olímpicos y fue a su vez, un fuerte impulsor de todos los deportes que podía acoger.
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